jueves, 23 de julio de 2015

Mateo 4 Jesus ayuna 40 dias y 40 noches



1 Entonces Jesús fue llevado por el Espíritu al desierto para ser tentado por el diablo.

 2 Y después de haber ayunado cuarenta días y cuarenta noches, tuvo hambre.

 3 Y se le acercó el tentador y le dijo: Si eres el Hijo de Dios, di que estas piedras se conviertan en pan.

 4 Mas él, respondiendo, dijo: Escrito está: No sólo de pan vivirá el hombre, sino de toda palabra que sale de la boca de Dios.

 5 Entonces el diablo le llevó a la santa ciudad, y le puso sobre el pináculo del templo

 6 y le dijo: Si eres el Hijo de Dios, échate abajo, porque escrito está:
A sus ángeles mandará por ti,
y te llevarán en sus manos,
para que no tropieces con tu pie en piedra.

 7 Jesús le dijo: Escrito está también: No tentarás al Señor tu Dios.

 8 Otra vez le llevó el diablo a un monte muy alto, y le mostró todos los reinos del mundo y la gloria de ellos,

 9 y le dijo: Todo esto te daré, si postrado me adoras.

 10 Entonces Jesús le dijo: Vete, Satanás, porque escrito está: Al Señor tu Dios adorarás y a él sólo servirás.

 11 El diablo entonces le dejó, y he aquí, los ángeles vinieron y le servían.

 12 Cuando Jesús oyó que Juan estaba preso, volvió a Galilea;

 13 y dejando Nazaret, vino y habitó en Capernaúm, ciudad marítima, en los confines de Zabulón y de Neftalí,

 14 para que se cumpliese lo que fue dicho por medio del profeta Isaías, cuando dijo:

  15
Tierra de Zabulón y tierra de Neftalí,
camino del mar, al otro lado del Jordán,
Galilea de los gentiles;
  16
el pueblo asentado en tinieblas
vio gran luz;
y a los asentados en región y sombra de muerte,
luz les resplandeció.
 17 Desde entonces comenzó Jesús a predicar y a decir: ¡Arrepentíos, porque el reino de los cielos se ha acercado!

 18 Y andando Jesús junto al mar de Galilea, vio a dos hermanos, a Simón, que es llamado Pedro, y a Andrés, su hermano, que echaban la red en el mar, porque eran pescadores.

 19 Y les dijo: Venid en pos de mí, y os haré pescadores de hombres.

 20 Ellos entonces, dejando al instante las redes, le siguieron.

 21 Y pasando de allí, vio a otros dos hermanos, a Jacobo hijo de Zebedeo, y a Juan, su hermano, en la barca con Zebedeo, su padre, que remendaban sus redes; y los llamó.

 22 Y ellos, dejando al instante la barca y a su padre, le siguieron.

 23 Y Jesús recorría toda Galilea, enseñando en las sinagogas de ellos, y predicando el evangelio del reino, y sanando toda enfermedad y toda dolencia en el pueblo.

 24 Y su fama se extendió por toda Siria, y le trajeron a todos los que tenían dolencias: los afligidos por diversas enfermedades y tormentos, y los endemoniados, y los lunáticos y los paralíticos, y los sanó.

 25 Y le siguieron grandes multitudes de Galilea, y de Decápolis, y de Jerusalén, y de Judea y del otro lado del Jordán.

4 comentarios:

  1. Padre, en tus manos encomiendo mi espíritu”, (Lucas 23, 46) Jesús abandonado en las manos de Dios, con la confianza del Hijo. Estas palabras nos hacen pensar que debemos de cuidar nuestra alma, no sólo nuestro cuerpo. Jesús entregó su cuerpo, pero no su alma.

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  2. Amen Jesus hijo de Dios ayuno 40 dias y luego comenzó su ministerio. Ejemplo a seguir bendiciones hnos

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